LA CONGREGACIÓN CRISTIANA EVANGÉLICA

CONGREGACIÓN  ES EL CUERPO DE CRISTO

LA CONGREGACIÓN CRISTIANA EVANGÉLICA: REFLEXIONES A LA LUZ DE LA PALABRA DE DIOS 

Reflexiones sobre la congregación cristiana evangélica y los intereses que la mueven en la actualidad donde todo parece ir al ritmo de la modernidad y donde muchos cristianos se dejan envolver por el devenir de los acontecimientos mundiales.

Bendecid@ amad@, en el encuentro de hoy reflexionaremos sobre lo que es la congregación cristiana evangélica y cuales intereses la mueven, pidiéndole al Señor mi Dios, la sabiduría necesaria para no generar discrepancias, sino que sirva para la edificación del pueblo de Dios. 

En ese sentido, te diré que aparte de la iglesia de Cristo que es nuestro cuerpo, concibo a la congregación como lo más cercano al trono del Señor, que por ser el pueblo de Dios reunido para la oración, la alabanza y la adoración, debe mostrarse santa, sana, robusta, libre y feliz, pues es el cuerpo de Cristo en plena acción. (Col. 1:18) 

En la congregación se siente gozo, unción y comunión con ese Dios excelso que nos dio vida, con Cristo maravillosamente perfecto, quien fue crucificado y levantado con gran poder y gloria, y puesto en lugar altísimo como Redentor y Rey, y con el Espíritu Santo quien se mueve en la congregación con gran manifestación, haciendo que muchos vibren, canten, se arrodillen o saltar por su poder. 

La congregación es el conjunto de las almas ganadas para Cristo, constituyéndose en un solo cuerpo, donde cada uno de manera individual, es un miembro enteramente necesario. 

EL propósito de la congregación es reunirse para estudiar la palabra y llevar el mensaje del evangelio de Cristo a todos los lugares. eso es, el sacrificio único y verdadero a de Jesús, con el que propició el perdón de todos los pecados, y el establecimiento del Nuevo Pacto mediante su sangre, su levantamiento de entre los muertos y ascensión al Padre, donde se sentó en lugar celestial, 

También nos heredó la promesa de vida eterna en un Reino que compartirá con nosotros; y que Dios manifestó a lo largo de las escrituras, con el fin de cambiar la visión de todas las cosas para transformación del viejo hombre, en hombre nuevo, donde Cristo viva en él y él en Cristo. 


Por lo tanto, el accionar de la congregación, debe fortificar al cristiano y ubicarlo entre hermanos que persiguen un mismo objetivo, formando vínculo de amor, respeto, solidaridad, misericordia y justicia, que son virtudes que manifiestan a Jesucristo. 

Si a la congregación le faltan estas virtudes, quien ministra debe revisar y redirigir su ministerio, porque el Señor es un Dios de unidad y de orden, cuyos principios fueron puesto de manifiesto mediante Jesús. (2 Corintios. 6:3-10) 

La congregación debe saber que cada hermano es única creación de Dios, que cada uno es distinto a los demás, en su personalidad, en su vida cotidiana, en su relación con El Creador y con los otros miembros del cuerpo de Cristo.

También debe entender que esa creación amorosa de Dios, está viva, siente, padece, y si está allí, es porque en algún momento de su vida, tuvo la necesidad de buscar al Señor por primera vez. 

Por ello, es necesario que como miembros del Cuerpo de Cristo, no se critique al hermano que muestra debilidad, ni se juzgue, ni sea apartado; tampoco se le acose, ni menoscabe, ni humille; más bien colocarse en su lugar y comprender, que en lo humano todos tenemos debilidades, limitaciones y defectos.

Pero todos andamos en busca de la perfección en Cristo, porque viviendo en Él y Él en nosotros, está la posibilidad de ser moldeados por el poder de la palabra, con la cual es transformado y perfeccionado todo el que arrastra vicios, errores y pecados, todo por causa de Jesucristo, para la gloria de Dios. (Romanos 14:13, 1 Timoteo. 1:15) 

Recuerda que los que buscan al Señor, buscan su perdón y la paz que sólo él sabe dar, ellos desean y necesitan sus tiernas caricias y el dulce descanso que de él procede, por lo que un alto porcentaje de estas personas, llegan a las congregaciones cristianas evangélicas con mucha necesidad de Cristo, y sed de beber de la Fuente de Agua Viva que emana de la palabra. 

De allí, la necesidad de un trato amoroso y compasivo con el que busca el camino hacia Dios, por lo que, la congregación debe manifestar a Jesucristo en todo momento, tanto en el hablar como en sus acciones y comportamiento. 

LA CONGREGACIÓN ES UNA FAMILIALa congregación debe presentarse sana, santa y libre del pecado, y eso sólo se logra permaneciendo en Cristo, porque se sabe que a lo largo de su estadía en las congregaciones, muchos se quedan para ofrecer verdadero servicio al Señor, y hacen de ella una nueva familia a la cual aman y respetan, mientras ayudan a edificar a otros. 

Pero también están los muchos, los que se quedan sólo por costumbre, haciendo que los templos se vean y escuchen bulliciosos, mientras se ministra la palabra; lejos de la oración y la adoración al Señor, convierten el hecho de congregarse, en un pasatiempo más como cualquier otro, ¿a quién adoran? 

Por ello, mi Amad@s, es urgente fortalecer la congregación, lo que está mal debe ser corregido, porque ella es para escudriñar la palabra de Dios y prepararse para llevarla a todos los lugares donde sea necesaria, además es para el encuentro fraternal de los unos con los otros, sin mezquindad , porque el Señor se dio así mismo mediante su amado hijo Jesucristo, quien no escatimó el sufrimiento, ni el dolor, ni la angustia para liberarnos una vez y para siempre, del pecado y de la muerte.

Por lo tanto, la congregación que desea ser transformada, fije su mirada en Cristo Jesús, trate de imitar su amor, misericordia, justicia y libertad, además del perdón y la reconciliación entre hermanos, porque fuera de eso, es una falsedad permanecer en ella. 

Lo ideal es que juntos se edifiquen, que cada uno de los miembros de la congregación busque la salvación propia y ayude a otros a encontrarla, para que todos estén preparados, para el gran día de la entrada triunfante de nuestro Señor Jesucristo… Que ni una sola oveja se pierda, para que todas juntas entren al redil del Buen Pastor.

Pulse el enlace para mayor información sobre el tema: Efesios 4:11-13    

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