EL NOVIAZGO ENTRE JÓVENES CRISTIANOS


EL NOVIAZGO ENTRE JÓVENES CRISTIANOS
UNA RELACIÓN PERFECTA ENTRE DIOS, TU NOVI@ Y TÚ

Si eres joven cristian@ que ha llegado a la etapa del noviazgo muchas veces no sabrás qué hacer ni cómo actuar y puede que entres en un dilema que podría confundirte si se te dificulta integrar a Dios en la relación entre tu novi@ y tú

Bienvenid@ mi amad@, a este nuevo encuentro cuyo propósito es difundir la palabra de Dios a través de este sitio web, por lo que pido al Señor que dé la sabiduría necesaria para llevar este mensaje, y que sea acogido en el corazón de cada uno de los que me leen, recordando siempre que Él es el creador y dador de todo cuanto existe, y toda la gloria y honra le pertenecen. 

Amad@, el Señor te dio un corazón y conoce desde el principio, lo que hay dentro de él, pero también te dio libertad mediante Jesucristo, para que puedas escoger por cuenta propia, si hacer lo bueno o hacer lo malo, si seguir su camino o desviarte de él. (Juan 14-6) 

En el mundo actual, son muchos los que escogen “lo malo”, lo que no agrada a Dios, el camino ancho y cómodo que lleva al disfrute de los placeres de la carne, es decir, del cuerpo y de todos sus sentidos; mientras que unos pocos eligen “lo bueno”, lo que agrada a Dios, que a la mayoría no le atrae, porque los lleva a un camino angosto y escabroso que conduce a sacrificar los placeres carnales. (Mateo 7:13.14) 

Esa libertad que Dios te dio, te permite elegir sin que Él intervenga en esa decisión, porque eres sólo tú, responsable de tus pensamientos, sentimientos y acciones, y tendrás que responder por cada una de ellas, aunque si pides al Señor en el nombre de Jesucristo, Él dará la dirección necesaria para que puedas elegir con certeza. (Gálatas 5:1) 

Por esa misma libertad, puedes decidir cuál vida quieres llevar, el trabajo que desempeñarás, las relaciones sociales que mantendrás, o la pareja con la que querrás pasar el resto de tu vida. (Gálatas 5:13) 

A quien elijas como compañer@, es para toda la vida, por lo que no puede ser cualquiera persona escogida sobre la base del agrado físico, económico, posición social, bienes u otra cosa que llame tu atención. 

Más bien, busca en ese ser, los fundamentos de la fe cristiana, y con ayuda de Espíritu Santo, observa su conducción como persona dentro de la congregación, en la comunidad, en sus sentimientos, emociones y virtudes, en el amor, la misericordia, el respeto y la obediencia, que manifiestan a Jesucristo en su vida. (Efesios 2:20-22) 

A quien elijas como pareja, estará el resto de tu vida contigo, compartiendo todo tus espacios físicos, emocionales y espirituales, por lo que no debe ser antagónico con tu carácter, y entender que Dios está por encima de todas las cosas, para que no se constituya en atadura que te perturbe o aleje del Señor. (Efesios 4:6) 

Los jóvenes cristianos que deciden tomar novi@, deben saber que mostrarán a la congregación, a un/a futur@ espos@, quien comparte y practica el Evangelio de Cristo, o al menos se inicia en su conocimiento. 

También deben saber, que el noviazgo no es para “pasar el tiempo” o para hacer “cosas” que pongan en riesgo la pureza del espíritu y del cuerpo, me refiero al hecho de sucumbir ante los deseos de la carne, que son frecuentes y perturbadores entre los noviazgos jóvenes, lo cual no es del agrado de Dios. (Gálatas 5:16-25) 

La joven cristiana debe saber, que al elegir aquel que será su esposo mediante el matrimonio, es un varón mandado por Dios para ser cabeza de la esposa y autoridad en el hogar, lo que implica que debe estar fortalecida en virtudes como la obediencia, la humildad, el respeto, la consideración y el servicio al esposo, sin que se sienta humillada o menoscabada, sino más bien, sintiéndose gozosa porque ama y es amada, respetada y protegida por Dios y por su esposo. (Efesios 5:21-24) 

El joven cristiano también debe saber, que la mujer que escoja como novia, debe estar al menos iniciada en el Evangelio, para que no sea antagónica a él, ni a su crecimiento espirituales; más bien una compañera fiel y amorosa que llegará con él a un matrimonio para toda su vida, por lo que deberá amarla, respetarla, apreciarla, protegerla y considerarla siempre, como criatura sublime y hermosa creada por Dios, que será la madre de sus hijos y pilar fundamental del hogar. (Efesios 5:25-31) 

También los novios cristianos deben tener en cuenta, que si uno de ellos llegase a fallar en la relación y el otro se siente lastimado, el ofensor deberá explicar con mucha humildad, la causa por lo que sucedió la ofensa, y comprometerse ante el Señor, a no volver a incurrir en ella. 

El ofendido deberá escuchar pacientemente, poniéndose en el lugar del otro, para que pueda comprender qué fue lo que pasó y juntos puedan detectar la debilidad y trabajar sobre ella con ayuda de Dios, para que se pueda activar la misericordia y así llegar al perdón. (Mateo 6:14-15) 

Recuerda mi amad@, que el perdón se da por el amor y vienen acompañados por la misericordia y deben estar activos en cada uno, para que puedan ayudarse mutuamente y salir adelante, siempre manifestando a Jesucristo en sus vidas, porque por Él y para Él fueron hechas todas las cosas, incluyéndote a ti y a tu novi@. 

Por tu juventud, tal vez no sepas que hay situaciones de la vida en pareja, que se tornan tempestuosas, afligen y muchas veces se hacen insoportables; ellas pueden presentarse por varias razones: “Dios quiere mostrarte algo”, “quiere que te despojes de algo para darte algo mejor”, “para que abandones el viejo hombre”, “para fortalecerte”, “o para que avances en tu vida espiritual”.  (Romanos 8:18)

No te preocupes, pon toda tu fe en el Señor y descansa en Él, porque ellas sólo son tribulaciones que en algún momento pasarán, mientras vivas en Cristo y estés confiad@ en que Espíritu Santo te acompaña y protege, porque ellas no son más grandes que Dios

Sabiendo ésto, entonces pon todos los problemas en manos del Padre en el nombre de Jesús, Él conoce a plenitud todos tus sentimientos, angustias, necesidades, alegrías y logros; ábrele las puertas de tu corazón al Rey de reyes, pídele que tome el control de tu vida, que te de la sabiduría necesaria para conducirte rectamente e invita a Espíritu Santo a que more en ti, para que en la adversidad, salgas victorios@. (Romanos 8:37) 

Por lo tanto, antes de elegir, pide a Dios que aparte a tu futur@ novi@ para ti, para que esa relación sea perfecta en Jesucristo y nada ni nadie pueda sacarlos del propósito de Dios, que es bueno, justo y perfecto. (Juan 14:13-14; 15:7; 16:24) (1 Juan 3:22-24; 5:14)

Como ves, Dios dá al que pide en el nombre de su amado hijo Jesús, si crees que Él es tu Salvador, cuando pagó por tus pecados en la cruz, te levantó con Él y te puso en lugares celestiales. (Colosenses 3:1-4) 

Eso sí, no te olvides cumplir con el gran mandamiento, y la gran comisión a la que el Señor mandó a todo cristiano que conoce el Evangelio, esto manifiesta la salvación que Jesucristo te dió, haciéndote partícipe de su Reino.

En cualquier circunstancia, es bueno que te apoyes además, en las orientaciones que tus guías espirituales y tus mayores cristianos puedan brindarte. Haz todas las cosas con calma y rectamente, siempre con tu mirada puesta en Jesucristo

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